Como cada año y motivados por el enorme despliegue de seguridad que se tiene por parte de los tres órdenes de gobierno, cientos de familias se dieron cita desde tempranas horas de este domingo para “apartar” el mejor lugar y disfrutar del tradicional desfile del Carnaval de Mazatlán, una de las festividades más esperadas y arraigadas del puerto, que ha perdurado por más de 127 años.
Desde el amanecer, el Paseo Olas Altas y el Malecón comenzó como cada año a llenarse de mazatlecos y turistas que buscan asegurar su espacio para apreciar el paso de los carros alegóricos, las Reinas del Carnaval, el Rey de la Alegría, comparsas coloridas y la música de banda, que son el alma de esta celebración.
La tradición de apartar lugares se ha transmitido de generación en generación, con algunas familias llegando incluso con días de anticipación para acampar y garantizar una vista privilegiada. Esta práctica refuerza el carácter familiar del Carnaval, que no solo es una fiesta para el puerto, sino para todos los habitantes del estado y turistas que como cada año no faltan a la cita.
