En una noche de fuego en el Estadio Jalisco, Paulinho se vistió de héroe y con un triplete encendió las esperanzas del Toluca rumbo a la Liguilla, mientras que Atlas vio esfumarse, prácticamente, sus aspiraciones de fase final. El 3-2 final reflejó el vértigo de un duelo en el que los Zorros pelearon hasta donde pudieron, pero sucumbieron ante el actual campeón de goleo, que llegará encendido a la Fiesta Grande.
Desde el minuto 3, los Diablos Rojos avisaron que no venían a especular. Canelo Angulo probó a Camilo Vargas, quien tuvo que emplearse a fondo en una primera mitad llena de sobresaltos. Apenas al 14’, Paulinho arrancó su obra: media vuelta en el área y disparo raso para el 1-0. Un gol que no solo encendía el marcador, sino que lo acercaba a la cima de los romperredes.
Ocho minutos más tarde, Toluca volvió a golpear. Una jugada sucia, aparentemente muerta, cobró vida tras un rebote en un tiro libre. Paulinho, con instinto depredador, empujó el balón al fondo. El VAR convalidó el tanto y el brasileño ya compartía el liderato de goleo con Diber Cambindo: 2-0 y dominio total de los escarlatas.
Pero Atlas no se rindió. En un partido donde Djuka era el llamado a comandar la ofensiva rojinegra, fue Eduardo “Mudo” Aguirre quien se hizo presente. Primero, con un tiro libre que se coló entre la barrera y un Luis García cómplice en la portería. Luego, al 44’, Aguirre cabeceó un centro con marca encima y de nuevo aprovechó la mala salida del arquero choricero para firmar el empate 2-2. El alma regresaba al cuerpo de los locales.
El complemento arrancó con tensión. Martín Nervo vio la roja al 57’, pero el VAR le dio vida al Atlas: amarilla y a seguir. Sin embargo, el Diablo tenía la última palabra.
Al 78’, cuando el partido parecía encaminado al empate, Paulinho apareció una vez más. Ganó en el salto precisamente a Nervo y fusiló a Camilo Vargas para su tercer gol de la noche. Un hat-trick que lo deja como líder en solitario con 12 tantos, superando a Djuka, y al Toluca con viento en popa hacia la Liguilla.
Atlas, por su parte, quedó con más dudas que certezas. Su lucha inmediata será evitar la multa del cociente y cerrar con dignidad un torneo que no cumplió expectativas. Le quedan Querétaro y Chivas en el calendario, pero parece que ya no hay futuro en el Clausura 2025.
Mientras unos se despiden, otros afinan el paso para levantar la corona. Y en Toluca, el diablo tiene nombre: Paulinho.
