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viernes, marzo 21, 2025
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Encuentran muertos a Gene Hackman y su esposa

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El legendario actor Gene Hackman, de 95 años, y su esposa, la pianista Betsy Arakawa, de 63, fueron encontrados muertos junto a su perro en su residencia de Santa Fe, Nuevo México, según informó la oficina del sheriff del condado de Santa Fe. Las autoridades indicaron que no hay indicios de crimen en las muertes; sin embargo, aún no se ha determinado la causa exacta del fallecimiento. La investigación continúa en curso. 

Hackman, nacido el 30 de enero de 1930 en San Bernardino, California, tuvo una destacada carrera cinematográfica que abarcó más de cuatro décadas. Ganó dos premios Óscar: uno como mejor actor por “The French Connection” en 1972 y otro como mejor actor de reparto por “Unforgiven” en 1993. Además, fue galardonado con dos premios BAFTA y cuatro Globos de Oro. Entre sus papeles más memorables se encuentran el del detective Jimmy “Popeye” Doyle en “The French Connection”, el villano Lex Luthor en “Superman” y el excéntrico patriarca en “The Royal Tenenbaums”. 

Antes de dedicarse a la actuación, Hackman sirvió en el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos como operador de radio. Tras su servicio militar, estudió periodismo y producción televisiva en la Universidad de Illinois, pero finalmente decidió perseguir una carrera en la actuación, formándose en el Pasadena Playhouse, donde entabló una amistad duradera con Dustin Hoffman. 

En 1991, Hackman contrajo matrimonio con Betsy Arakawa, una pianista clásica. La pareja se estableció en Santa Fe, Nuevo México, donde llevaron una vida tranquila y alejada de los reflectores. Tras su retiro de la actuación en 2004, Hackman se dedicó a la escritura, coautorando varias novelas de ficción histórica. 

Tras la muerte de los actores, el director Francis Ford Coppola, quien trabajó con Hackman en “The Conversation”, lo describió como “un gran actor, inspirador y magnífico en su trabajo y complejidad”. Por su parte, el actor George Takei expresó: “Hemos perdido a uno de los verdaderos gigantes de la pantalla. Gene Hackman podía interpretar a cualquiera y se podía sentir toda una vida detrás de él”. 

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