Una jueza dictó prisión preventiva justificada a Carlota “N” y a sus dos hijos, Eduardo “N” y Mariana “N”, tras ser detenidos por el asesinato de dos personas en Chalco, Estado de México, presuntamente por la invasión de un inmueble.
Sin embargo, la mujer de la tercera edad, podría llevar su proceso en libertad.
En punto de las 18:30 horas de ayer, comenzó la audiencia inicial para Carlota “N” y sus hijos, los cuales, estuvieron presentes en el área de seguridad de la sala número 4 de los juzgados de control de juicios orales con sede en el penal de Chalo, Estado de México.
Al dar inicio, la juzgadora calificó de legal la detención, al asegurar que se realizó bajo el cumplimiento de una orden de aprehensión, de manera inmediata el agente del Ministerio Público formuló la imputación en su contra haciéndoles saber la investigación que realizaban en su contra.
Señaló que el día de los hechos, Mariana habría increpado a los supuestos invasores “si no se salieron por las buenas será por las malas, hijos de su puta madre”, momento en el que regresó al vehículo, del que descendieron Carlota y Eduardo con un arma de fuego.
Puntualizó que Mariana fue quien le ordenó a Carlota asesinar a las víctimas, “mátalos mamá, párteles su madre” y fue también quien ordenó a Eduardo dispararle al menor de edad, motivo por el cual los tres están siendo investigados por el delito de homicidio calificado, en grado de tentativa en contra de un joven de 19 años y un adulto 51 años.
Eduardo y Mariana también están siendo investigados por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa en contra de un menor de edad.
Al hacerles saber la investigación en su contra, se solicitó la vinculación a proceso. Sin embargo, su abogado solicitó la duplicidad del término constitucional.
El agente del Ministerio Público, solicitó como medida cautelar la prisión preventiva justificada al asegurar que en caso de llevar su proceso en libertad podrían estar en riesgo los testigos y familiares de las víctimas, además de que podrían sustraerse de la acción penal.
Por su parte, la defensa solicitó la libertad condicional a través de firmas periódicas, exhibición de una garantía económica y uso de brazalete.
Por lo que pidió, el arraigo domiciliario de la señora Carlota “N”, al comprobar que es mayor de 70 años y que necesita de insulina cada 4 horas por ser diabética.
Solicitó también la misma medida para Mariana, al asegurar que padece episodios psicóticos, bipolaridad comprobada y ataques epilépticos, por lo que pidió también llevar la prisión preventiva en un centro psiquiátrico.
Finalmente, la juzgadora fijo la prisión preventiva, con la excepción de que Carlota “N” pueda llevar su proceso en libertad una vez que su defensa compruebe un lugar de arraigo.
En cuanto a Mariana solicitó que sean peritos de la Fiscalía del Estado de México quienes determinen el estado psicológico para determinar si es inimputable o existe la posibilidad que sea internada en un hospital psiquiátrico.