Tras una breve ceremonia, los familiares del escritor arequipeño Mario Vargas Llosa se retiraron discretamente del lugar, tal como había sido previsto por la familia, que decidió llevar el duelo en la más estricta privacidad.
Horas antes, Álvaro Vargas Llosa, hijo mayor del premio Nobel de Literatura, se dirigió a los medios de comunicación para reiterar que la despedida se realizaría de forma privada, cumpliendo con la voluntad expresa de su padre, quien no deseaba homenajes póstumos.
“Hemos acordado tratar de llevar este duelo en la intimidad, por eso estamos velando a mi padre en casa, en lugar de hacerlo en un lugar público”, explicó Álvaro, agradeciendo además las muestras de cariño recibidas por parte del público.
En ese contexto, pidió con firmeza a los medios y ciudadanos que respetaran la privacidad de la familia en estos momentos difíciles. “Vamos a evitar hacer más declaraciones más allá de las que ofrecí este lunes, por respeto a los medios, al público y a las personas que han hecho llegar sus mensajes de afecto y de cariño”, señaló.
Finalmente, visiblemente conmovido, expresó: “No tengo otra cosa que decir que el Perú ha perdido a uno de sus mejores hombres y nosotros a un ser infinitamente querido a quien vamos a echar de menos”.