En una noche donde el protagonismo recayó más en el árbitro y sus desiciones que en el balón, las Chivas de Guadalajara dejaron ir una oportunidad clave para meterse de lleno a la pelea por el Play-In, al empatar 1-1 ante el Mazatlán FC en la cancha del Estadio El Encanto. El árbitro Fernando Hernández fue el nombre más mencionado tras un encuentro lleno de decisiones polémicas que condicionaron el rumbo del partido.
El Rebaño, que terminó con nueve hombres en el campo, se quedó con las manos vacías después de haber estado arriba en el marcador y mostrar momentos de dominio. Gerardo Espinoza y su equipo ahora están obligados a ganar sus últimos dos partidos si quieren seguir soñando con la Fase Final.
Desde el inicio, Mazatlán impuso condiciones. Apenas al minuto 4, Luis Rey cometió una falta sobre Luis Amarilla dentro del área que parecía penal, pero Fernando Hernández no lo sancionó. Los Cañoneros mantuvieron la presión y al 6’, Roberto Meraz obligó a Raúl Rangel a intervenir con una gran atajada tras un cabezazo que pudo abrir el marcador.
Sin embargo, fueron las Chivas quienes se adelantaron. Al 15’, Roberto Alvarado sirvió un centro preciso que Teun Wilke remató de cabeza para vencer a Hugo González y poner el 0-1 en favor del Guadalajara. El joven delantero respondió a la confianza con un gol que ilusionaba a la visita.
Motivados por la ventaja, los rojiblancos buscaron ampliar la diferencia. Al 17’, Alan Pulido sacó un disparo que exigió a González, y al 29’, Miguel Gómez estuvo cerca del segundo, pero Lucas Merolla salvó en la línea. Aun así, el partido no dejó de estar manchado por las decisiones arbitrales: Samir Caetano cometió una falta sobre Wilke al 35’ siendo el último hombre, pero Hernández, tras revisar en el VAR, solo mostró amarilla.
En la segunda parte, las Chivas arrancaron con fuerza. Pulido estrelló un disparo en el poste al 52’, y aunque Mazatlán intentaba responder, las emociones se volcaron hacia el cierre del juego.
La expulsión de Luis Rey al 82’ encendió las alarmas en el banquillo de Espinoza, quien respondió con cambios defensivos, incluyendo el debut del joven central Diego Delgadillo. Pero lo peor aún estaba por venir.
Al 87’, una jugada entre Gilberto Sepúlveda y Bryan Colula llevó a Fernando Hernández al VAR. Tras revisar, el árbitro no dudó en marcar penal a favor de Mazatlán y, para colmo, expulsó al portero Raúl Rangel por doble amarilla. Sin arquero disponible, Erick Gutiérrez se puso los guantes para defender el arco.
Desde los once pasos, Luis Amarilla cobró con frialdad al 94’ y decretó el empate definitivo, dejando a las Chivas con un amargo sabor y muchas dudas sobre el arbitraje.
Con este resultado, Guadalajara se complica la vida. El margen de error es nulo y solo dos triunfos en sus próximos compromisos podrían salvar su torneo. Una noche que pudo ser redonda, terminó en frustración y polémica en territorio sinaloense.
