Las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Agricultura y Estudios Legislativos Primera del Senado, aprobaron la reforma constitucional para la conservación y protección del maíz nativo.
La reforma modifica los artículos 4 y 27 de la Constitución Política.
El dictamen plantea que México es centro de origen y diversidad del maíz, que es un elemento de identidad nacional, alimento básico del pueblo y base de la existencia de los pueblos indígenas y afromexicanos, por lo que su cultivo en el territorio nacional debe ser libre de modificaciones genéticas producidas con técnicas que superen las barreras naturales de la reproducción o la recombinación, como las transgénicas.
Todo otro uso del maíz genéticamente modificado, señala el dictamen debe ser evaluado en los términos de las disposiciones legales para quedar libre de amenazas para la bioseguridad, la salud y el patrimonio biocultural de nuestro país y su población.
Además, debe priorizarse la protección de la biodiversidad, la soberanía alimentaria y su manejo agroecológico, así como la promoción de la investigación cientiìfica-humaniìstica, la innovación y los conocimientos tradicionales.
El dictamen recibió el respaldo de nueve votos a favor y dos en contra en la Comisión de Puntos Constitucionales; nueve a favor, dos en contra y una abstención en la Comisión de Agricultura; y nueve a favor en la de Estudios Legislativos Primera.