Los ataques aéreos israelíes en Gaza han resultado en la trágica pérdida de al menos 900 vidas y más de 4,500 heridos, según el Ministerio de Sanidad palestino. Este ministerio ha solicitado la creación de un pasillo humanitario para recibir suministros médicos y evacuar a heridos graves.
El comunicado denuncia la continuación de la agresión a Gaza durante cuatro días consecutivos, describiéndola como una brutal y deliberada violación de los derechos humanos. Se señala que los ataques están dirigidos a zonas residenciales, resultando en la destrucción de viviendas con personas en su interior, lo que refleja una intención genocida.
De acuerdo con el informe del Ministerio, entre las 900 víctimas se encuentran 260 niños, 230 mujeres, así como trabajadores de la salud y periodistas. Además, se informa que 22 familias, con un total de 150 personas, han sido completamente aniquiladas, y 140,000 ciudadanos se han visto obligados a huir de sus hogares, buscando refugio en condiciones precarias.
El comunicado también destaca que los ataques han afectado gravemente al sistema de salud, con la destrucción de instalaciones médicas y ambulancias, exacerbando una ya grave escasez de medicamentos y materiales debido a cortes de electricidad y combustible.
El Ministerio de Sanidad hace un llamamiento urgente a las autoridades para establecer un pasillo seguro que permita la entrada de ayuda médica y delegaciones médicas en Gaza, así como facilitar el traslado de heridos y pacientes que no pueden recibir tratamiento en la región. Se solicita con urgencia donaciones de medicamentos y material médico por parte de organizaciones humanitarias.
