Las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos del Senado, aprobaron por mayoría de votos la reforma a la Constitución que simplifica la estructura orgánica del Estado, que implica la desaparición de siete órganos constitucionalmente autónomos (OCA), entre ellos, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
Los cambios al artículo 28 de la Carta Magna, avalados con 25 votos en pro y 11 en contra, crean una nueva autoridad en materia de competencia económica, que concentrará las facultades del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) en áreas como preponderancia y regulación asimétrica, sumándolas con las de la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
Este nuevo ente se ajusta al Tratado de Libre Comercio entre México, Canadá y Estados Unidos (T-MEC), al ser un órgano desconcentrado e independiente con capacidad de investigar y sancionar, esto con el objetivo de fomentar una mayor competencia económica.
Estas comisiones también avalaron la extinción del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), de la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) y la Comisión Nacional Hidrocarburos (CNH).
La oposición posicionó en contra del dictamen.
La priísta Carolina Viggiano, sostuvo que la desaparición de los órganos autónomos es un retroceso, porque estos estaban creados para evitar que intereses económicos se mezclaran con el gobierno.
“Retorcemos enormemente y es un pésimo mensaje al interior de México y hacia afuera de México, y otro error que me parece muy grave es que todas estas reformas y desaparición de estos organismos, de estas instituciones, se mientan en un solo cajón. Todas son distintas y tienen distinto origen, tienen distintos propósitos, incluso sus presupuestos son muy dispares. Que por cierto el discurso de que es para ahorrar, me parece que no viene al caso”.
Marko Cortés, senador del PAN, acusó que con esta reforma el régimen morenista está construyendo una dictadura.
“Al desaparecer los organismos autónomos se están desapareciendo los contrapesos democráticos. Está claro que no les gusta tener otros datos, solo los que el propio régimen genera. (…) Y no les guta que haya independencia en los órganos autónomos y por eso los desaparecen”.
Alejandra Barrales, senadora de Movimiento Ciudadano, afirmó que este es el proceso de destrucción institucional más grande que el país tenga memoria en la era moderna, cuyo eje articulador e es someter la vida pública y sus instituciones a la voluntad de una mayoría transitoria.
“Hoy son eliminados de un plumazo las instituciones que a los mexicanos nos constaron construir por muchos años a través de procesos de diálogo entre las diferentes fuerzas políticas y que en varios casos también muchos de estos órganos son producto de las luchas democráticas de la izquierda”.
El vicecoordinador de Morena, Ignacio Mier, defendió la reforma.
Aseveró que con esta reforma “nunca más organismos que estén al servicio de intereses particulares, facciosos, a costa del presupuesto del pueblo de México, y en favor muchas veces de intereses extranjeros”.
“Desmantelar sí, claramente lo decimos, todo un andamiaje simulado en beneficio de intereses económicos y de la oligarquía, que son aquellas familias más poderosas nacionales y extranjeras, que se quedaron con el 80 por ciento del patrimonio nacional, y provocaron la pobreza más escandalosa que haya tenido este continente en apenas 30 años”.
El dictamen se envió a la Mesa Directiva para su publicación en la Gaceta Parlamentaria y se ponga a discusión y en su caso aprobación del pleno.